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Este edificio tiene 31 plantas por encima del terreno y cuatro por debajo del mismo donde se colocan los locales de instalaciones y almacenes.

El motivo principal que constituye la particularidad del edificio es el hecho de estar montado sobre el túnel de enlaces ferroviarios entre las estaciones de Atocha y Chamartín. Esta situación trajo como consecuencia la particularidad de que los soportes principales del edificio debían estar separados 19 m entre caras interiores.

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Hacer que la estructura de cada una de las plantas, de 30 m x 40 m de superficie, tuviese esta luz resultaba especialmente caro, por lo que se decidió concentrar el trabajo de puentear los túneles en 6 plataformas de hormigón pretensado, cada una de las cuales soporta cinco plantas normales de estructura metálica ligera. Las plataformas de hormigón pretensado se apoyan en los dos núcleos de comunicación vertical, colocados uno a cada lado del túnel inferior.

Las plataformas son de hormigón pretensado y están formadas por dos grandes vigas longitudinales pretensadas, y se sitúan adosadas a los núcleos verticales. La plataforma se completa con 8 vigas transversales, también postensadas, que se apoyan en las vigas longitudinales formando entre todas un emparrillado monolítico.

El problema que presentaba este emparrillado lo constituía su apoyo sobre los núcleos. Estos están formados por una sección cajón, por donde se deslizan los ascensores, de 10,56 m de longitud y 6,3 m de anchura, con paredes de 0,85 m de espesor.

Las dos grandes vigas longitudinales del emparrillado tienen 2,01 m de canto, están pretensadas y tienen sección en doble “T”.

Las vigas transversales, también en doble “T”, tienen canto variable entre 2,01 y 1,41 m en el borde. Todo este emparrillado estaba pretensado.

El problema de la unión entre núcleo y plataformas lo producían las deformaciones de fluencia y retracción del hormigón de las plataformas que ocasionaba unos esfuerzos muy importantes en los núcleos verticales, núcleos de gran rigidez empotrados en cimientos. Para evitarlos se dispuso en primer lugar que estas plataformas de hormigón pretensado fuesen prefabricadas y adosadas por pretensado al núcleo, pero por conveniencia de la empresa constructora se construyeron “in situ” por lo que fue necesario disponer un apoyo exterior que saliendo del núcleo permitía que se produjesen los movimientos longitudinales sin que se coaccionase por los nucleos.

 


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