El puente sobre el río Caudal en Mieres es un arco tímpano de 70 metros de luz que proyectó Carlos Fernández Casado para la Jefatura de Puentes.
El puente se construyó en 1968, y en la oficina se hizo un modelo reducido de plástico para estudiar la distribución de tensiones en los tímpanos. Se vio que el arco concentra las cargas en el nervio inferior y los tímpanos sirven de reparto de cargas.
El puente se construyó mediante semianillos prefabricados que se montaron apoyados en los salmeres y en una torre central. Sobre ellos se hormigonaban los tímpanos y posteriormente la losa superior. Los semianillos llevaban un atirantamiento exterior provisional que se retiraba una vez hormigonados los tímpanos.