El puente se construyó, igual que el de Almodóvar, por dovelas prefabricadas de 10 toneladas de peso montadas con blondin; desde una pila se avanzó en voladizo único a partir de un vano lateral construido sobre cimbra, y desde la otra se avanzó en voladizos compensados de 50 metros de longitud. Las dovelas se pegaron en este puente con resina epoxi en vez de mortero, solución que se utilizó en todos los puentes siguientes. Cada voladizo estaba formado por dos cajones que se montaban con dovelas unicelulares unidas in situ con la losa superior.