Se trata de un puente curvo constituido por tres vanos de 81,0 m + 106 m + 71 m, siendo el vano principal el que salta la ría de Bilbao, en el centro de la misma ciudad, sobre los antiguos astilleros de Euskalduna.
Presenta varias características que le hacen único y la principal es la configuración de la sección transversal.